EL PRI NUNCA SE RAJA… ¿Y YAHLEEL ABDALÁ? ¡ELLA SI!

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En el proceso electoral 2019 de Tamaulipas, estamos en la etapa del registro de los candidatos, de los diferentes partidos políticos, para competir por las diputaciones locales de Tamaulipas, y a 18 días para el inicio de las campañas electorales, y que verán su conclusión el dos de junio, cuando los ciudadanos votaremos por la renovación del Congreso de Tamaulipas, conformando la LXIV legislatura, la que habrá de acompañar al titular del ejecutivo del estado en el segundo periodo de su mandato constitucional.

Y entonces, del 15 de abril al 29 de mayo, los candidatos y los partidos tendrán el arduo trabajo de salir a la calle, a presentar argumentos y buscar convencer a los electores de cruzar en la boleta electoral el logotipo de su partido y el nombre de sus candidatos, de mayoría y plurinominales, que estarán participando en la contienda electoral. Y, por supuesto, va a ganar el partido y el candidato que tenga más argumentos para convencer a los votantes

Por cierto, hace algunos días, Yahleel Abdalá Carmona, presidenta estatal del Partido Revolucionario Institucional, acudió a la sesión del Instituto Electoral de Tamaulipas y ahí, bajo la consigna de que el PRI “no se raja”, la neolaredense exhibió su desconfianza en el organismo electoral.

Y sin una justificación expresa, Abdalá Carmona se habilitó a sí misma como representante del PRI ante el órgano electoral, en la búsqueda de reflectores, obvio, cuando todos los pronósticos le auguran un resultado terrible a su partido ante la falta de personajes, operadores políticos, estrategias y recursos, lo que podría ubicar al tricolor en tercero o cuarto o quinto lugar, al ex invencible, a quien ya nadie le cree y en quien muy poca gente confía, después de un terrible sexenio de Egidio Torre Cantú, lo que cambió diametralmente el deseo de los electores quienes después de 86 años le dieron su voto al proyecto de los vientos de cambio en 2016. Y en esta nueva elección, en 2019, las encuestas marcan también, una tendencia muy favorable al partido azul en las próximas votaciones.

Yahleel llega a la elección sin apoyo, sin dinero, dice ella, sin credibilidad, sin rumbo, ella y su partido, con fama de perdedora y con fama también de no cumplir los acuerdos y compromisos con quien los amarró. Ahí queda como muestra su argumento de ayudar a las familias de la franja fronterizas a lograr un acuerdo para la regularización de los autos chocolates, lo que nunca, en los tres años de cobrar como diputada federal, pasó de un argumento banal y mediático, sólo para justificarse ante los electores, porque de acciones y hechos nada. Yahleel es buena para el rollo, pero muy mala para aterrizar las acciones.

Lo peor es que Yahleel en este momento no se acuerda, su mente no le permite recordar que antes de 2016 la cosa era en sentido contrario, pero como en aquel entonces las circunstancias les favorecían a los priistas, pues no había que denunciar nada, no había que reprochar nada, y la única elección era dejarse apapachar por el poder. Así llegó ella a San Lázaro en 2015, pero en la elección de 2018, en donde buscaba llegar al Senado de la República, mordió el polvo vergonzosamente ante Américo Villarreal Anaya de MORENA y ante el panista Ismael García Cabeza de Vaca. Y ella, perdedora, pero al frente de un PRI Tamaulipeco necesitado de liderazgo, de buenas acciones y de sudar la camiseta, lo que por ningún lado se ve en esta triste dirigencia.

¿Cómo puede Yahleel motivar a los candidatos si la neolaredense es perdedora? ¿Cómo puede motivar a los electores si desde los cargos de elección popular en que se ha desempeñado no ha dado resultados? ¿Cómo puede motivar a los ciudadanos si desde que llegó a la dirigencia tricolor, que no liderazgo, no ha hecho ningún trabajo de territorio? ¿Cómo puede hablarse de una líder exitosa, si no supo conformar un equipo ganador de cara al proceso electoral del próximo 2 de junio? Podría decirse que Yahleel da lastima al frente del PRI pero no lo voy a decir porque no es este un argumento que deba utilizarse y más tratándose de una mujer.

Yahleel Abdalá Carmona lo único seguro que tiene al día de hoy es que ella será diputada plurinominal, la primera en la lista, y habrá de llegar al Congreso para adjudicarse su beca durante 36 meses, a partir del 1 de octubre de 2019, y a partir de ese día podrá tirarse con tranquilidad a la milonga, y ojalá y entregue la estafeta del partido a alguien que, por lo menos, tenga un poquito de ganas de no dejar que el PRI se acabe de morir en discusiones bizarras y nulas acciones sociales de peso.

En pleno proceso electoral, el Comité Directivo Estatal del PRI en Tamaulipas, luce solo, e incluso, al edificio tricolor, se le empiezan a notar las condiciones físicas de una instalación digna de un partido de oposición, carente de recursos, ideas y militantes que ayuden al sostenimiento de ese partido, al grado de que la pintura del edificio se ve como si fuera del siglo pasado. Ah, pero eso sí, con la frase en grande: “El PRI nunca se raja”. ¿Y Yahleel? Ella sí. Dicen sus allegados, los muy muy cercanos, que la dirigente ya quiere tirar la toalla.

PD. 1. En un tweett que esta mañana publicó el presidente estadounidense, Donald Trump, en su cuenta de la red social del pajarito, volvió a amenazar con cerrar la frontera sur al criticar la inacción de México, Honduras, Guatemala y El Salvador para frenar el flujo de inmigrantes con destino al país. “México no está haciendo NADA para ayudar a detener el flujo de inmigrantes ilegales a nuestro País. Solo hablan y no toman medidas”, escribió Trump en su cuenta de Twitter.

“Igualmente, Honduras, Guatemala y El Salvador han tomado nuestro dinero durante años, y no hacen NADA. A los demócratas no les importa, unas leyes NEFASTAS. “¡Puede que cierre la Frontera Sur!”, agregó Trump.

La pregunta obligada si la reacción del presidente Trump tiene que ver con las cartas enviadas por el presidente López Obrador al Rey de España o al Papa Francisco y es una medida para evitar que al mandatario norteamericano le hagan alguna petición como la devolución de las tierras vendidas por Antonio López de Santa Ana, digo, al recordar aquello de que la mejor defensa es el ataque.