Martín Díaz / La Nube
En Reynosa se ha dado a conocer una denuncia en la que la empresaria restaurantera Perla Cáceres acusa a la senadora Maki Ortiz Domínguez de ordenar el desalojo del restaurante “Azul Antiguo” como represalia política. Según la denuncia, Maki Ortiz habría adquirido el inmueble donde opera el restaurante y condicionado la compra a que se desocupara el local, lo cual se interpreta como una venganza por la aprobación el 11 de febrero de una reforma en la Ley de Ingresos de Reynosa 2025. Esta reforma, que redujo las cuotas para los vendedores ambulantes, contaba con el apoyo de Marco Gallegos Galván, cuñado de la denunciante y diputado local.
Perla Cáceres afirma que siempre ha cumplido con el contrato de arrendamiento vigente y que la notificación del desalojo fue repentina, sin oportunidad de negociar o de presentar una oferta para adquirir el inmueble. Las acusaciones han generado alarma en la comunidad, pues se interpreta que se estaría utilizando el poder político y la compra de bienes inmuebles para ejercer presión y eliminar a quienes se interponen en ciertos intereses políticos.
La situación, que ha sido difundida en diversos medios locales, sigue en desarrollo y podría tener implicaciones legales, dado que la empresaria anuncia que buscará defender sus derechos a través de la vía judicial.
